Mes de abril. ¡Primavera! Las terrazas de las tabernas del centro de Atenas están repletas. Unos músicos, más bien tristes, distraen como pueden a los turistas. El indispensable buzuki, magníficas canciones del rebético clásico con unas letras conmovedoras que los turistas no entenderán. Entre dos cervezas y “tres brochetas a la griega” de carne de cerdo, importada de Holanda en un 95%, los medios de comunicación de la colonia se extasían ante la “única gran victoria del único y gran Macron”. ¡Primavera de los pulpos!
Prensa griega. Atenas, 25 abril 2017 |
al y como estaba previsto, la reacción... espontánea de los directivos de SYRIZA no se ha hecho esperar, por ejemplo, la de la portavoz del partido Tsiprosaurio, Rania Svigou felicitando calurosamente a Pierre Laurent y su Partido Comunista claramente Macronímico por su “actitud responsable y de izquierdas” (colocándose de manera casi explícita a favor de Macron); y en lo que respecta lo incalificable, el cualificado Aléxis Tsipras se ha apresurado, tal y como cuentan los medios de comunicación griegos, en llamar a Emmanuel Macron para desearle “el mayor de los éxitos en la batalla de la segunda vuelta contra la extrema derecha y asimismo, expresarle toda su confianza ante su elección y para que así la amistad y la cooperación entre Grecia y Francia se prolongue.”
“Emmanuel Macron le ha contestado que desde el comienzo y, en su calidad de ministro de François Hollande, había apoyado todos los esfuerzos realizados por el gobierno griego, así como la necesidad imperativa de cambiar de actitud hacia Grecia: ‘Puedo asegurar que si soy elegido, trabajaremos juntos para que Europa pueda dar respuesta a las necesidades de nuestra generación”... los Franceses, junto con los Griegos, generación tras generación debieran por lo tanto sentirse confortados.
Europa, hija del rey de Tiro, que fue secuestrada hace mucho tiempo por Zeus, transformado para la ocasión, como es bien sabido, en toro, los Griegos tienen la impresión de que en esta “Europa” sus tiempos van muy deprisa y van dando vueltas sin solución. Afortunadamente el cine sigue existiendo y, en Atenas, para cambiarse un poco las ideas ha llegado el tiempo de un “Tour de France” bien particular, puesto que se trata de la película de Rachid Djaidani con Gérard Dépardieu y Sadek, proyectado en estos momentos en las salas de Atenas, en el marco del Festival de cine francófono. ¡Primavera, porque no todo está perdido!
Europa sobre el toro, terracota de Atenas, siglo V a.C. Museo Kanellopoúlou, Atenas, abril 2017 |
El último tango en París del bipolarismo político”. Prensa griega, 25 abril 2017 |
“Tour de France”, la película de Rachid Djaidani. Atenas, abril 2017 |
La indiferencia, o sino su apariencia, se generaliza. En realidad, la opinión griega se encuentra en estos momentos sacudida por una mezcla detonante de decepción y de cólera, interiorizada hasta lo más profundo de los atrincheramientos de la psique. Después de todo, el puerto de Tesalónica acaba de venderse, a su vez, por la cifra de 231.926.000€ a una coalición empresarial franco-germano-rusa, los afortunados ganadores son: “Deutsche Invest Equity Partners GmbH”, “CMA-CGM”, “Belterra Investments” y “Terminal Link SAS” (prensa griega del 25 de abril 2017). .
En ello consiste quizás que Europa dé respuesta a las necesidades de cierta generación, según la conversación telefónica, conversación de amor, entre Emmanuel Macron y Aléxis Tsipras.
Y la vida transcurre... por cierto, para muchos Griegos su búsqueda de supervivencia se acerca de manera fatal al círculo de las necesidades vitales, de ahí que muten en cuanto a su percepción de lo político. Cuando se sabe que la acción política no se inicia sino a partir del momento en el que los humanos transgreden el espacio de las necesidades vitales para interrogarse sobre lo justo y lo injusto, es ahí que se entiende, sin ambages, el acosmismo que triunfa en Grecia (al igual que en otras partes).
En nuestros muros, eslóganes del siglo precedente. Atenas, abril 2017 |
Conciertos gratuitos bajo la Acrópolis. Atenas, abril 2017 |
Antigüedad... tardía. Atenas, abril 2017 |
En nuestras paredes, los eslóganes del siglo precedente aportan a su manera la impresión de que la historia se acelera. Las ilusiones acaban por agotarse, y en lo que respecta a los curiosos y los turistas, estos apreciarán los conciertos gratuitos que organiza la ciudad de Atenas bajo la Acrópolis, delante de su nuevo museo. ¡Por qué no!
Al fin y al cabo, Atenas no es “Karakas” (en vez de Caracas), su antigua Ágora nos resulta incluso más bella y nos “habla” más que nunca. Así son las cosas, la vida de los pueblos... o de los pulpos, depende, seguirá siendo siempre de alguna manera digna de ser vivida, incluso contra vientos y mareas.
Al igual que en los tiempos de la larga Antigüedad Tardía (siglos III a VII de nuestra era), el orden de nuestro mundo vive cambios sensibles. El rol y el estatuto de los ciudadanos se han degradado, por decirlo de manera amable. La pulverización de los ingresos caracteriza la suerte de los muchos, las Polis (nuestras ciudades y Estados actuales) sufren el declive de sus propios recursos, y su situación financiera y estatus de empleo forzado, lleva a los trabajadores a la condición de esclavos cuando, en realidad, son ciudadanos... con una notoria diferencia; hoy en día es el trabajo el que desaparece y al igual que en el siglo IV, la pequeña propiedad sigue disminuyendo y los pequeños propietarios tienen cada vez más dificultades en satisfacer las exigencias fiscales del Imperio.
Por lo que sé, tras la enésima reforma de la Educación nacional en Francia, se ha modificado profundamente la enseñanza de la historia en el Colegio y en el Instituto, periodos enteros de la historia han sido suprimidos, principalmente la Antigüedad Tardía (siglos III-VII) así como la historia bizantina. Sin embargo esa supresión también suprime la historia de la ciudad de Bizancio. ¡Que casualidad!
La antigua Ágora cerca del cementerio del Cerámico. Atenas, abril 2017 |
Karakas... en Atenas. Abril 2017 |
El pescado y su mercado. Atenas, abril 2017 |
Los turistas maravillados se pasean bajo la Acrópolis, y en los puestos de algunos vendedores del Ágora de Atenas (¡la de 2017!) muchos libros en francés, y el pescado sigue expuesto en su mercado. Es así que contemplamos este tiempo extendido de la Troika como si fuera un ritual de tránsito, incluida la reciente Macronimia.
Mi amigo Olivier Delorme lo describe con mucho acierto en su blog , “En Grecia, ‘En Marche!’ se llama Potami (El Río) y Macron (Stavros) Theodorákis pero la cosa fue demasiado lejos en 2015 para que la gente cayera en la trampa. Entonces llegó Tsipras quien, en resumidas cuentas, cumplió con la misma función.”
“En Italia, Macron se llama Renzi y llegó por medio de un golpe de Estado interno denominado de izquierdas PDS; acabó rápidamente. En España, Macron se llama Albert Rivera, En Marche! lleva el nombre de Ciudadanos (Citoyens), y ha funcionado lo suficiente como para permitir a la derecha quedarse en el poder gracias a los falsarios de los socialistas.”
“En cada caso, se ha tratado de hacer creer que se estaba haciendo algo nuevo con objeto de dar un respiro al viejo imperio germano-europeo en vías de desmoronarse sobre si mismo, sin embargo los pueblos no consiguen entender que hay que desprenderse de él para volver a encontrar un margen de maniobra y de control de su propio destino. En cada caso, se ha tratado de proporcionar un rueda de recambio al carruaje del desastre que nos lleva a toda pastilla hacia el abismo. La cosa se instala en todas partes gracias a la adhesión de la nomenklatura alarmada al constatar que el pueblo empieza a cuestionar su posición dominante - lo que se le debe.”
Turistas bajo la Acrópolis. Atenas, abril 2017 |
Libros en francés. Atenas, abril 2017 |
Turistas muy tempraneros. Plaza de la Constitución, Atenas, abril 2017 |
En Grecia, sabemos que no se trata ni de una “transición” de corta duración y menos aún de un momento (solamente o simplemente) electoral. Nuestra... Antigüedad Tardía, revisitada anticipadamente, es un tiempo relativamente (e históricamente) largo y, sin ninguna duda, peligroso. Lo que en ningún caso significa, para nosotros los Griegos, que ese mismo tiempo, de alguna manera, nos sea tenido en cuenta, al contrario, la Macronimia política encarna ya esa primera etapa de la metapolítica, “la epopeya” d’Elon Musk y la tecnociencia están gestándose.
Emannuel Macron pertenece a esa primera generación 100% cooptada de autómatas de la “política” robotizada, con una sola diferencia, a los electores todavía se les “invita” a finalizar la elección del... Imperio. Sin embargo, este proceso metantrópico, se acabará tarde o temprano (si nada cambia), y sencillamente se suprimirá (o será reducido muy ampliamente) el derecho al voto.
Los Griegos “de abajo” comentan el resultado de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas con cierto amargor, por no decir con cierta simpatía desafortunadamente impotente, frente a las perspectivas que parecen “ofrecerse” al pueblo francés. Los franceses con los que me he encontrado en Atenas se muestran indecisos e inquietos, independientemente de las opciones políticas. A veces caminamos juntos en la calle de la Teoría y, como si de las necesidades de un ceremonia se tratara, nos detenemos en los museos, muy meditativos, por ejemplo ante el “ostracon” que lleva el nombre de Temístocles hijo de Néocles, fragmento de cerámica en el que se inscribía su voto durante el corto período de la democracia ateniense antigua.
El gran hombre de Estado y estratega ateniense fue castigado al ostracismo en el 471 a.C. y se refugió en un primer momento en Argos y, más adelante junto al rey de Persia, Artajerjes I, hijo de Jerjes, al que Temístocles había vencido en la batalla de Salamina. El gran rey arqueménida le confío el gobierno de las ciudades griegas de Asia Menor, que administró hasta su muerte en el 459 a.C.
El ostracon que lleva el nombre de Temístocles. Atenas, Museo Kanellopoúlou, abril 2017 |
Animales adéspotas en las ruinas antiguas. Atenas, abril 2017 |
Bajo la Acrópolis. Atenas, abril 2017 |
Mujer sintecho. Atenas, abril 2017 |
Recordemos que en la Antigua Grecia, el ostracismo consistía en expulsar a una persona de la ciudad por decisión de la asamblea pública, procedimiento de expulsión temporal, diez años, apartando así al ciudadano considerado como peligroso para el Estado.
Precisamente bajo la Acrópolis, bajo el sol de los ostracismos modernos, nuestros animales adéspotas se esconden a veces entre las viejas piedras y nuestros sintecho sufren algo menos gracias a una meteorología más clemente. Nuestra museografía del teatro antiguo, exacto reflejo de la democracia, así como de su final en tantos otros tiempos, podría todavía alimentar nuestra reflexión.
El visitante de la ciudad de Atenea que presta atención, observará el bello texto del cementerio antiguo del Cerámico, reproducido por un artista de nuestros tiempos sobre un cercano muro:
“Es cosa fácil alabar a una buena persona. Alabanza abundante que puede encontrarse con facilidad. Pero ahora, es en los graneros de Perséfone, y en una habitación compartida por todos, donde Dioniso, aprecia esta alabanza.”
Epitafio de Dioniso, reproducción. Atenas, abril 2017 |
Exposición sobre el teatro antiguo revisitado. Museo Kanellopoúlou, abril 2017 |
Aspectos revisitados del teatro antiguo. Museo Kanellopoúlou, abril 2017 |
Mes de abril que finaliza. Primavera en las terrazas del centro ciudad de Atenas bien repletas de nuestro teatro tan contemporáneo.
Los medios de comunicación se extasían como pueden, nuestros animales adéspotas bajo la Acrópolis nos observan, llevan sin duda alguna el aura de los que han visto otros horizontes otros que los de nuestras metademocracias.
Con todo, apreciamos nuestro tiempo histórico, nuestros intercambios que todavía transcurren bajo un cierto Logos, nuestro presentismo, si fuera posible reflexionado. Primavera de los pulpos y ¡sin embargo!
Traducido por: JM Alegria
Animal adéspota bajo la Acrópolis. Atenas, abril 2017 |
* Foto de portada: Músicos más bien tristes. Atenas, abril 2017